miércoles, 7 de enero de 2009

De tocho morocho

Para el post de hoy quiero tratar algo distinto, debido a que tengo mucho que escribir, pero no tengo mucho que decir al respecto, escribiré de todo un poco.

Por fin terminó el maratón “Guadalupe Reyes”, y a muy buena hora, cabe señalar, pues si seguía comiendo como hasta ahora iba a regresar rodando.

La televisión nacional estrenó programación con motivo del nuevo año: Canal Siete por fin le va a bajar a las interminables horas matutinas de “infomerciales” con una barra de programación infantil con producciones de Disney, la gran ganadora ¡Qué tristeza!

Anduve “callejenado” por el centro vallartense ayer; que lindo es encontrar gente conocida en los lugares más comunes: la fila del banco, la plaza pública etc. También saludar a los amigos de los negocitos de los que soy cliente habitual: la tienda de velas de Marcia, o el cafecito deli de la chinita simpática, donde hacen el sándwich de pastrami más sabroso que jamás he comido.

“Prometer hasta meter, ya metido, cuernos con lo prometido” dice un frase popular, que seguramente aplican muy bien en Televisa. Alguien explíqueme ¿Para que se la pasan prometiendo año con año que ahora si viene un súper programa de espectáculos que le haga sombra a Ventaneando, si al final terminan haciendo programas como NXclusiva? El refrito de E - News al que tanto le temía hubiera sido mil veces mejor, para que ahondar ¡Deplorable!

Deplorable también fue el cacareado cierre de Carlos O’Brians el pasado viernes (¿O fue el sábado?) La prensa local se dedicó a ensalzar el arduo trabajo de la marca para posicionar el destino: que si era un icono con mas de treinta años de actividad y no se cuanto más, pa que todo acabara a las 10:00 de la noche, sin fiesta del adiós ni nada por el estilo. Cuentan mis informantes que uno de ellos tuvo la fortuna de beberse la ultima chela del lugar y se la sirvieron quemada.

Tengo pánico de televidente sin servicio de cable: en vez de programas de concursos que se volverían un hitazo con la inminente crisis económica a los directivos de las televisoras del país se les ocurrió la grandilocuente idea de ofrecernos programas de carácter motivacional “ingesu!”, dijera el Ramones.

No se cuando empiezan las clases, ni cuando puedo re hacer mi horario. Cómo ya se me acabaron las cosas que tenia que decir este post también. Mejor me voy a checar esas ondas. Espero que se hayan divertido tanto como yo.

No hay comentarios: