sábado, 23 de mayo de 2009

Mi historia con Jumex


Hace ya varias semanas que ronda en la televisión la nueva campaña publicitaria de la llamada “botella más conocida de México” y es justamente el tema que elegí para volver de mi prolongado silencio; pues estoy convencido de que es cierto: "Todos tenemos una historia con Jumex". La mía dice así:

Mi nombre es Christian Mendoza mi historia con Jumex sucedió hace año y medio más o menos. Fue durante mi última gran enfermedad, una laringitis bárbara que me tuvo enfermo 10 días. Una vez terminadas las cajas de pastillas, píldoras, capsulas y jarabes; que cómo cereza del pastel me obligaba a utilizar cubre bocas hasta las 11 de la mañana y a beber líquidos a temperatura ambiente destacando uno para combatir la deshidratación; pude comer y beber lo que se me dio la gana.

Una mañana, al salir hacia la escuela, me detuve delante de la tienda a causa de mis bolsillos vacíos, o sea sin cambio para el bus, y entré con la convicción de comprar un "chucheria" que me permitiera abordar el tren sub urbano sin ningún problema. Después de mirar por aquí y por allá y después de casi decidir por un yogurt para beber miré a través de la vitrina de cristal y me sentí atraído por lo que en aquel entonces era una de las novedades publicitarias: la lata - botella Jumex.

La tomé, pagué por ella y me fui. Antes de subirme al tren la guardé entre mis cosas y al llegar a la escuela durante una clase muy aburrida, de esas en las que si no leíste de plano no puedes participar y por regla general casi nadie lee, saqué mi jugo Jumex y comencé a beberlo. Había dado apenas un par de tragos cuando la mandarina sentada atrás de mi me susurró al oido, con aire hippie medio anarquista: “Sabias que ese jugo está hecho con frutas transgenicas que pueden causarte cáncer”- “So… eventually I’II die” – contesté con tono de diva fresa. “Pero no preferirías morir sin un dolor feo” replicó. Pensé un instante y al imaginar un dolor profundo en el estómago contesté: “De acuerdo, tienes un punto”. Mientras que airosa sentenció que lo que debía hacer era beber los jugos del Pato Pascual.

Desde ese entonces no he vuelto a beber un jugo Jumex, cada vez que la idea me cruza la cabeza recuerdo las palabras de la mandarina y cómo me agrió ese último trago de néctar sabor durazno.

Esa es mi historia con Jumex. Todos tenemos una historia con Jumex ¿Cuál es la tuya?

5 comentarios:

Unknown dijo...

Asi es la Mandarina de bitch.

Yo no tengo historia jumetz...

DavidOchoaD dijo...

Yo tampoco tengo história Jumex..

=(

Anónimo dijo...

yo creo que todo lo que dicen de jumex es una farsa por
envidiosos ¿o no?
ATT:prinsses

Anónimo dijo...

MMMM yo vivo donde hacenlos jumex y creo que todos lo camiones de fruta que llegan no puede ser transgenicos, creo que hay mas calidad en los jumex que el los pascual o los boing que ni a jugo ni nectar llegan solo son refresquitos.

Anónimo dijo...

yo creo ke si son transgenicos, jumex ya es un monopolio y desgraciadamente la mayoria de los productos en el mercado estan contaminados de transgenico, cren ke si no fueran lo dirian en los empaques o botellas pero bueno nomas ponen lo ke les combiene y el gobierno no hace nada, ni nos dan la elección de que es lo ke keremos consumir porke ya todo es una porkeria pero bueno no nos keda de otra ke tragar.